viernes, 12 de junio de 2009
Herraje
Tenemos por costumbre, la manía
de querer poseer todo lo que amamos:
Como marcando el ganado para sentir
Pertenencia...
Y la misma muerte
nos demuestra que es imposible
tal dominación.
Nada nos pertenece...
¡No somos dueños de nada!.
Salvo, de lo que experimentamos
como seres esperituales y
amorosos que somos, por naturaleza.
Cuando posees a álguien, le pones
un grillete en el pie,
con una piedra tan pesada,
que termina aplastando
lo querido.
Y el que está atado, termina por
entender, que su perímetro de
acción es más pequeño que un Centro
Comercial...
Me Enseñaste...
que no es necesario atar a alguien
para tenerlo en tu corazón.
Que los sentimietnos más nobles provienen
de aquél que quiere crecer y dejarte
crecer.
Que la libertad siempre será tu aliada,
Porque aquél que está lejos, si vuelve,
es porque así lo quiso.
Y cada instante que esté a tu lado
será lo más auténtico que puedas atesorar...
Que no es necesario decir Te Amo, para
poder demostrar afecto por alguien.
Que todos los sentimientos
que siente nuestro corazón,
tienen la misma importancia para quién los valora
y los respeta, por ser un regalo más que
nos dá la Vida.
MD.
Etiquetas:
certezas
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