Siempre vuelvo...
Porque ningún abrazo es suficiente,
porque tu imagen se desgasta en mi memoria
de tanto pensarte...
Y mis ojos,
se trasnochan de beber tu silueta.
Quiero saturar mis sentidos de tu risa,
de tu voz,
para clavarte en mi mente para siempre.
Por eso regreso siempre a tí...
Para volverte realidad en mi vida,
en mi piel cuando me toco en soledad y
en mi corazón cuando descubro que late
aceleradamente
ante tu inminente cercanía.
Porque estamos bajo el mismo cielo.
M.D.
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